Hay momentos en la vida que nos ponen a prueba, momentos difíciles y sin embargo tan necesarios. Uno de ellos llega al ver desvanecer todo el futuro y todos los planes que habíamos envisionado junto a aquella persona especial. Qué hacemos entonces cuando esa historia en la que éramos co-protagonistas ha llegado a su final? Y más importante aún, a dónde nos dirigimos ahora luego del ɢᴀᴍᴇ ᴏᴠᴇʀ? La respuesta sólo puede ser una: Hacia adelante.
No somos de hierro.
Somos humanos.
Es inevitable experimentar un período en cual nos sintamos muy vulnerables y seamos más propensos a pensar que cada canción en nuestra playlist es un extracto de nuestra vida sentimental. No podemos reprimirnos, tenemos derecho a sentir y lidiar con nuestras emociones pues solamente al desahogarnos podremos realmente empezar a sanar. Es importante tener en claro que, si bien es cierto este período es ineludible, éste no debe ser prolongado más de lo saludable. Es necesario lograr levantar la mirada para poder apreciar nuestro nuevo horizonte.
El tiempo logra que
nos acostumbremos y desacostumbremos
de todo.
Probablemente una de las grandes razones por las que nos aferramos a nuestra realidad pasada es el temor implícito a darnos cuenta que ya no nos encontramos en una relación y, sobre todo, que ahora una vez más debemos empezar desde cero. Al estar en el punto de partida es natural tener la sensación de que nos hace falta algo importante. Aquel vacío no es una señal para buscar un nuevo e inmediato romance; este vacío se debe al cambio drástico que ha sufrido nuestra rutina diaria: Nos habíamos acostumbrado a miradas, mensajes, visitas, detalles y demás todo en relación a alguien más. Llegó entonces la hora de acostumbrarnos a algo distinto.
No es el fin del juego.
Es un nuevo nivel que revoluciona
nuestro pequeño mundo anterior.
Empezar de cero es una oportunidad para redefinir aquello que trae felicidad a nuestros días y redescubrirnos como seres individuales que cuentan con su propia personalidad, talentos y sueños; es decir, podemos finalmente dedicarnos a nuestro desarrollo personal. Podemos usar el nuevo tiempo disponible para conectarnos con nosotros mismos y nutrir nuestras habilidades. Imagina tan sólo todo lo que podríamos aprender y desarrollar en dos años! Tantos cursos, grados y talentos esperando por nosotros.
Recordemos que nuestro bienestar no puede depender de la voluntad de alguien más, no podemos dejar de vivir esperando que llegue "el amor de nuestra vida" a rescatarnos. Somos personas completas que deben buscar su propia felicidad y sólo al vivirla estaremos listos para compartirla con alguien más. Somos jóvenes y la gran verdad es que sin importar si nos sumimos en nostalgia o luchamos por mejorar, el mundo va a seguir girando y los días van a seguir transcurriendo. Nosotros decidimos como deseamos vivir el día de hoy.
Un feliz Saturday night a todos =]
"We fall. We fall apart."